domingo, 24 de enero de 2010

Lasaña de verduras con toque de Ricotta

Enero es el mes de los buenos propósitos para el nuevo año. Uno de los que aparecen en muchas listas es el de adelgazar o, al menos, mejorar nuestra alimentación.

Además, después de los excesos navideños, el cuerpo nos pide una dieta con pocas grasas (y aunque no lo pida, será mejor que se la demos =)
La receta que hoy os traigo es un claro ejemplo de dieta mediterránea y una forma bien rica de incluir verduras en nuestra alimentación.

Lasaña de verduras con toque de Ricotta




Ingredientes (3-4 personas):

12 láminas de lasaña de verduras (yo utilizo de la marca "El Pavo", ya vienen precocidas y sólo hay que sumergirlas unos minutos en agua caliente).
2
Berenjenas1 Bolsa de espinacas frescas y limpias
1 Cebolla
1 Tarrina de
queso RicottaQueso parmesano rallado
1 Ajo, aceite oliva y sal

Para la salsa bechamel: 50 gr de mantequilla, 50 gr de harina, 1/2 l de leche, nuez moscada y sal.

 
Comenzamos poniendo un recipiente con agua caliente y sumergimos las placas de lasaña en el agua, el tiempo que indique el fabricante (unos 10 minutos).

 

Cortamos las berenjenas en láminas de 0,5cm aproximadamente, no es necesario pelarlas. Les ponemos sal por ambas caras y las dejamos en una escurridera para que suelten el amargor.



Mientras las berenjenas se "curan", vamos preparando las espinacas. Pelamos y cortamos una cebolla en brunoise (a taquitos) y la sofreimos con aceite de oliva junto al ajo picadito bien fino.

Cuando la cebolla esté transparente, añadimos las espinacas, un poco de sal, damos unas vueltas y tapamos un par de minutos hasta que se hagan.
 



A estas alturas ya será momento de sacar la pasta del agua caliente y extenderla sobre un trapo limpio para que se seque.

Enjuagamos las berenjenas bajo el grifo para quitarles el exceso de sal y las secamos con papel absorbente. Ponemos un poquito de aceite en la sartén o plancha y vamos haciendo las berenjenas. Si queremos acelerar la cocción podemos tapar la sartén y así el vapor ayudará a que se ablanden antes.



En una fuente de horno colocamos una primera capa de pasta y la untamos con queso Ricotta.

El queso Ricotta (del latín "recocta"="recocida"), es como el requesón; un queso blanco, suave, de textura blanda y granulosa, un elemento crucial en la cocina italiana. Es tan suave que no sabe a queso, sino más bien a nata como el Philadelphia.



 
Sobre la capa de Ricotta pondremos una capa de berenjenas, tratando de cubrir toda la superficie.
 

 


De nuevo una capa de pasta, otra de Ricotta y sobre éste las espinacas salteadas.


 
 
Seguidamente otra capa de pasta, Ricotta y berenjena. Finalizamos nuestra lasaña vegetal con una capa de pasta, sobre ella la salsa bechamel y el queso parmesano rallado.
 
 
La preparación de la bechamel ya os la he explicado en otras ocasiones, la podéis consultar en los canelones deluxe.
 

Gratinamos en el horno hasta que se dore el quesito y ¡listo para servir! Este plato lo podemos preparar el dia anterior y guardar en la nevera a falta del gratinado. Es algo costoso, pero el resultado merece la pena y vuestra silueta os lo agradecerá.

Soy consciente de que las espinacas tienen muchos enemigos, pero como ya sabréis son muchos los beneficios que aportan: pocas calorías, mucha fibra, tienen hierro, ácido fólico, sustancias antioxidantes, acción diurética... Y si no que se lo pregunten a POPEYE!

Si las camuflamos en platos un poquito elaborados como éste serán mucho más llevaderas.

Gracias por leerme!

Besitos! Gloria.

No hay comentarios: